Esta semana he estado tan ocupado con la vida, que dudé si escribir una segunda nota, pero dado que ya hablé del remake de Avatar en el pasado (en una publicación más positiva, claro), sentí que era lo correcto cerrar el ciclo con este nuevo y oscuro capítulo. Como puse en Twitter, pareciere que cada vez se hace más y más difícil defender a Netflix del internet, tan poco misericordioso como de costumbre. Nadie quería otro remake de Avatar, ¿estamos de acuerdo? La única razón por la que estábamos a bordo de esta reinvención, era que el equipo creativo original estaba de vuelta, pero ahora se han ido... ¡por la peor razón posible! diferencias creativas. Todo parece indicar que Netflix quiere llevar el show por una costa que DiMartino y Konietzko no quieren recorrer. ¿Qué significa esto? bueno, vamos a tratar de ver el problema desde ambas trincheras y de ser objetivos.
Antes de empezar, este es un fragmento del mensaje de despedida de Michael Dante DiMartino: "Cuando Bryan y yo firmamos para el proyecto en 2018, fuimos contratados como productores ejecutivos y showrunners. En un anuncio conjunto para la serie, Netflix dijo que se comprometían a respetar nuestra visión para este recuento y a apoyarnos en la creación de la serie. Y nosotros expresamos lo emocionados que estábamos por la oportunidad de estar a la cabeza. Desafortunadamente, las cosas no han ido como esperábamos […] Me di cuenta de que no podía controlar la dirección creativa de la serie, pero podía controlar cómo responder. Así que elegí dejar el proyecto. Ha sido la decisión profesional más dura que jamás he tomado y ciertamente no una que haya hecho a la ligera, pero era necesario para mi felicidad y mi integridad creativa"
Primero: veamos esto desde la esquina de los creadores de la serie. Los tipos tenían una visión clara sobre lo que querían hacer con este live-action, y por lo que sabemos, su visión era una que se sostenía sobre una pieza fundamental: fidelidad, con un reparto asiático prominente, para empezar. ¿Qué cambios quiso implementar Netflix que no fueron parte de esta visión? ¿Podría haber sido una diferencia creativa con el casting? quizás, con Netflix (como el 90% de los estudios gringos) teniendo miedo de poner protagónicos no caucásicos frente a una producción de alto presupuesto. Esto a un nivel de producción, claro, si es que hubo también un conflicto a nivel narrativo, es difícil adivinar cual fue con la poca información que tenemos actualmente.
Netflix tiene fama de dar libertad creativa a sus series, pero ese puede ser un panorama distinto con una producción tan costosa y con tanto potencial como esta, sobre todo cuando sabemos que el servicio de streaming está desesperado por encontrar su “Juego de Tronos” o su “Harry Potter” (ellos mismos lo han dicho), una franquicia rentable que se convierta en su producto bandera. Una serie como Avatar, que posee dicho potencial, puede haber hecho que Netflix se cierre a algunas de las ideas de los creadores de la serie para priorizar sus intereses a largo plazo. Finalmente, algunos han salido de sus cavernas a hacer bromas sobre que “seguro querían a hacer a Aang gay, equisde” y dudo mucho, la verdad, que las diferencias creativas hayan ido por ese lado. La inclusión de personajes LGTB no debería ser un problema, y en este caso, no habría necesidad de cambiar la orientación sexual del protagonista porque DiMartino y Konietzko han incluido personajes gays y bisexuales originales desde prácticamente el inicio de todo, con Kyoshi en La leyenda de Aang o la mismísima Korra en la serie secuela.
¿Pero qué significa esto para el remake? El infierno, eso significa. Creo que la presencia de los creadores era el principal gancho que tenía este proyecto, y sin ellos, Netflix enfrenta un problema mayúsculo frente a un sequito de fans bastante devotos. ¿Suficiente desastre como para cancelar el proyecto? uhmmm... habiendo invertido tantos recursos en la preproducción, lo dudo muchísimo. Con todo y controversia, la serie va a tener una audiencia inicial de todas maneras, aunque solo sea por curiosidad. El mejor accionar de Netflix ahora, es colocar como nuevo showrunner a un peso pesado que pueda ganarse la confianza de la gente, pero, aun así, ya hay una mancha que va a tomar mucho trabajo poder borrar. AHORA, si resulta ser cierto que la serie va a diferir del material original, esto no quiere decir que vaya a ser una mala serie de todas maneras. Separemos las cosas: Iron Man 3 es una "mala adaptación", quizás. ¿Pero una mala película? no lo creo, personalmente. Un ávido lector de cómics se puede haber agarrado a latigazos en el cine al ver lo que le hicieron al Mandarín, pero alguien que solo conoce las películas… bueno, la pasó bien y ya está. Una buena película no es igual a buena adaptación o viceversa, y lo mismo va para las series. La película de Shyamalan fue una terrible adaptación y una terrible película, de golpe, pero quizá esta serie pueda arreglárselas como una adaptación más libre (estoy tratando de ser positivo). Incluso DiMartino y Konietzko dijeron que es probable que la serie termine siendo buena, solo que no será su visión original. De cualquier forma, me hubiese encantado poder ver la visión de los creadores en pantalla, su amor por la serie es innegable, y sea cual sea el resultado final de Netflix, esperemos que sea el mejor. Hoy por hoy, estamos heridos, y solo nos queda ver como se desenvuelven los hechos en los siguientes meses.
Ahora, seamos abogados del diablo: voy a tratar de argumentar en defensa de Netflix.
Apenas voy por la temporada 2 de La Leyenda de Korra, no me maten, pero entiendo que hay mucha controversia con esta secuela. Mucha gente detesta el camino por el que fue llevado el proyecto, y consideran que se cometieron muchos errores narrativos en el transcurso de las cuatro temporadas, e independientemente de que tengan razón o no, la recepción mixta está, la he visto a lo largo de los años tan clara como el agua. ¿Los creadores pueden haber perdido la chispa? Es posible. La leyenda de Aang fue lo que fue, porque ambos tenían ciertas restricciones por parte de Nickelodeon, con Korra, no tenían prácticamente ninguna. Las limitaciones hacen maravillas, ¿saben? George Lucas tuvo muchas cuando hizo la trilogía original de Star Wars, y luego, cuando tuvo los recursos necesarios, se esmeró en retocar dichas películas con efectos especiales que acabaron rebajando su calidad, demostrando que Lucas, si hubiese tenido todo el dinero y la tecnología del mundo cuando las creó, hubiese hecho películas inferiores.
Otro argumento que puede hacerse, amerita que vuelva a hacer una comparativa con Star Wars: Dave Filoni (la mente maestra detrás de Star Wars: La Guerra de los Clones) nunca trabajó con live-action, pero hizo un trabajo soberbio en el mundo animado. El tipo fue llevado a dirigir algunos episodios de The Mandalorian, y por más increíble que sea la serie, tiene dos episodios que tropiezan un poco ¿adivinas quién los dirigió? Exacto, Filoni. Medios distintos requieren sensibilidades distintas. DiMartino y Konietzko no han hecho nada más que animación en su carrera, y no han hecho nada que no sea Avatar en la última década. Seamos totalmente sinceros con nosotros mismos, a Netflix le podemos criticar muchas cosas (sus películas originales, por ejemplo), ¿pero sus series? Han hecho una que otra basura, seguro, pero cuando ves el panorama completo, Netflix es probablemente la casa realizadora que más series sólidas ha parido (detrás de HBO, claro), originales o co-producidas, por ejemplo: Stranger Things, Dark, Daredevil, The Crown, House of Cards, Narcos, Mindhunter, Umbrella Academy, Bloodline, The Punisher, The Witcher, Ozark, Black Mirror, Orange is the new Black, Bojack Horseman, Glow, Peaky Blinders, Haunting of Hill House, Sex Education… ¿sigo? Si ha habido diferencias creativas, ¿tenemos que asumir ciegamente que fue Netflix quien la cagó? ¿o podemos considerar mínimamente que los creadores de la serie querían hacer algo que no estaba funcionando? Dejo la idea allí. Personalmente elijo creer que los creadores hubiesen hecho un mejor trabajo que Netflix por su cuenta, PERO tampoco voy a cegarme ante las alternativas. Si queremos ser objetivos, de nuevo, tenemos que ser capaces de ver la guerra desde ambas trincheras.
Conclusión: ha sido un bajón lo que ha pasado, pero bueno, ya está. Pase lo que pase, con la película de Shyamalan encima y un remake que -en el peor de los casos- podría ser bastante mediocre, aún tenemos la serie animada, y esa sí nadie nos la va a quitar. El concepto de "van a arruinar la serie original" nunca ha tenido mucho sentido para mí, digo, nadie va a borrar el clásico animado de la existencia o a formatear nuestros cerebros, obligándonos a olvidar. Aang, Zuko, Toph, Soka y Katara van a seguir viviendo en el formato en el cual nos enamoramos de ellos, y siempre podremos revivir sus aventuras cuando queramos. Así que volvamos al libro uno, respiremos profundo y esperemos lo mejor.
Ey!! Gran Nota. Personalmente no sigo las noticias sobre proyectos de Netflix, sin embargo, ahora estoy muy interesado con el desenlace de "El nuevo airbender". Éxito y ojalá continúes con el blog :D
ResponderEliminarGracias por el comentario y la buena vibra. Esperemos a ver como continúa esta historia.
EliminarGenial la nota, nunca me hubiese puesto a pensar en argumentos "positivos" a favor de Netflix.
ResponderEliminarPsdt. Te sigo desde que iniciaste, creo xD me alegra que hayas vuelto a escribir, me parece muy genial y objetivo la manera que tratas las noticias.
Genial, gracias Víctor por persistir pese a mis extensas pausas jaja prometo quedarme ahora si. Un abrazo.
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